Los niveles de ozono sobre el Ártico han comenzado a descender
Empiezan a aparecer grietas en los bordes del escudo de gas que protege el mundo.
Mientras la comunidad internacional se esfuerza por contener el tamaño del agujero de la capa de ozono encontrado en la Antártida desde 1990, las últimas mediciones de los expertos de Meteored advierten que un agujero es «probablemente inminente» al otro lado del eje de rotación, en el hemisferio norte.
Víctor González, el meteorólogo que informó del «inusual» fenómeno, responde a algunas de las preguntas que plantea el descubrimiento.
En primer lugar, ¿Qué es la capa de ozono y cómo funciona?
La capa de ozono es una banda de la estratosfera que tiene una mayor concentración de moléculas de ozono (03) que el resto de la atmósfera».
González señala que:
«la mayor densidad se encuentra en la estratosfera media y baja, a 20-30 km sobre el nivel del mar, donde es más probable que absorba la radiación dañina del sol».
¿Cómo se forman los agujeros?
Según este experto, la concentración de la capa de ozono no es uniforme en toda la atmósfera, sino que «es más baja en los polos».
De hecho, la concentración varía periódicamente y es más pronunciada durante el periodo «invernal». Pero a partir de la primavera, «tiende a aumentar de nuevo».
Las actividades humanas y los fenómenos naturales aumentan la concentración de gases como el cloro y el flúor», dijo González.
El ciclón ha demostrado ser «particularmente estable» tanto en la troposfera como en la estratosfera interior, pero las recientes mediciones realizadas en el hemisferio norte en febrero muestran que «ya está mostrando los primeros signos de agotamiento del ozono» y podría ser «el comienzo de un gran agujero en la capa de ozono».
¿Dónde aparecen?
Para responder a esta pregunta, los expertos advierten que los cristales de hielo:
«…actúan como un catalizador, facilitando la reacción de los compuestos de cloro y ozono. Se forma en las partes más frías de la estratosfera. La falta de vapor de agua favorece la cristalización y la formación de nubes en la estratosfera polar. Por ello, «se forman sobre las regiones polares y en las partes más frías de la baja estratosfera».
El vórtice polar es un factor clave
Además de la contaminación atmosférica y los factores meteorológicos, las condiciones climáticas también son factores importantes en la aparición del agujero de ozono.
En este sentido, el «vórtice polar», la gran masa de baja presión y aire frío que rodea los polos de la Tierra, es de suma importancia.
Este invierno, según los meteorólogos:
«el vórtice polar fue fuerte y estable durante todo el invierno, sin grandes fluctuaciones ni perturbaciones tanto en la troposfera como en la baja estratosfera, con velocidades de viento muy elevadas. Y, en contra de lo que podría pensarse, esto no es una buena noticia para la sostenibilidad de la capa de ozono»
González explica que:
«…al estar en un vórtice sostenido, el aire frío no se moverá, favoreciendo la formación de cristales de hielo y el desarrollo de nubes estratosféricas polares en las próximas semanas», lo que, a su juicio, «agravará los daños al reducir las concentraciones de ozono estratosférico».
Ya ocurrió en 2020
Por último, González admite:
«una situación muy similar se produjo en marzo de 2020, cuando el agotamiento del ozono estratosférico superó la regeneración. Este incidente fue excepcionalmente violento y provocó un agujero de una escala nunca antes medida sobre el Ártico».