¿Por qué la energía fotovoltaica va de la mano de la ecología? Beneficios para el medio ambiente
Los ecologistas llevan años dando la voz de alarma y los científicos no cesan de demostrar una serie de cambios climáticos debidos a la negligencia y la ignorancia, señalando las consecuencias que podrían acarrearnos.
Afortunadamente, la propia concienciación del problema nos ha permitido cambiar ciertos hábitos, lo que ha dado lugar a un sector ecológico en auge. Un excelente ejemplo de ello es la popularización en la instalación de placas solares, que nos permiten producir nosotros mismos electricidad directamente del sol.
Las placas solares son consideradas una tecnología ecológica debido a que generan electricidad sin emitir dióxido de carbono ni otros gases de efecto invernadero. Pero mucha gente se pregunta qué ocurre con las placas solares después de su vida útil.
Construcción de placas solares fotovoltaicas e impacto ecológico
La producción de energía a partir de una instalación fotovoltaica es totalmente ecológica y se denomina «energía verde«.
Sin embargo, para evaluar el impacto ecológico de las placas solares, es útil seguir todo su ciclo de vida: producción, funcionamiento y desmantelamiento (eliminación).
Producción de placas solares
Hasta hace poco, la producción de placas fotovoltaicas dejaba una importante huella de carbono. Sin embargo, las modernas tecnologías de producción hacen que el proceso de fabricación de componentes fotovoltaicos sea más seguro para el medio ambiente.
Las placas solares suelen fabricarse con silicio, germanio y selenio, así como con vidrio, plástico, metal y componentes de cableado. Los procesos de fabricación actuales han reducido al mínimo la producción de sustancias tóxicas; por ejemplo, el reprocesamiento de silicio ha reducido la necesidad de extraerlo.
Funcionamiento de las placas solares
Las placas solares fotovoltaicas generan energía únicamente a partir de la radiación solar. Para ello no necesitan otras materias primas como el carbón, por lo que no emiten dióxido de carbono ni otros gases nocivos al medio ambiente.
¿Cuánta electricidad produce un panel fotovoltaico? Depende de varios factores, como el grado actual de insolación, la inclinación del tejado, las sombras, el ángulo de los rayos solares y el tamaño de la instalación. Por término medio, una placa solar fotovoltaica de 1 kWp puede producir aproximadamente 1.000 kWh de electricidad al año.
Sin embargo, las placas solares fotovoltaicas no contaminan en absoluto el medio ambiente durante su funcionamiento.
Eliminación de placas solares
Una instalación fotovoltaica puede funcionar ininterrumpidamente hasta 30 años. Transcurrido este tiempo, las placas se desinstalan.
El desmantelamiento de las placas consiste en retirar el marco, quitar los cables y cualquier componente de los módulos. El siguiente paso es cortar y triturar las placas para separar los componentes según los materiales individuales y devolverlos para su reutilización.
Gracias al uso de tecnología punta, la gran mayoría de las materias primas pueden recuperarse de las placas fotovoltaicas (incluso más del 90% puede recuperarse del vidrio y el aluminio). La gran mayoría de las obleas de silicio también son reutilizables.
Por otra parte, los componentes que ya no pueden utilizarse de ninguna manera se reciclan a temperaturas de hasta 500℃. El proceso de reciclado y eliminación permite reutilizar los componentes individuales de las placas o eliminarlas por completo, de modo que ningún residuo acaba en el medio ambiente.
Otros aspectos positivos de las placas solares
- Posibilidad de instalar placas en casi cualquier superficie: en el tejado de un edificio o en el terreno circundante.
- Menos ruido: Las placas solares fotovoltaicas funcionan silenciosamente y no emiten ruidos desagradables para las personas. El sonido sólo lo genera el ventilador que refrigera el inversor necesario para el funcionamiento, pero es un sonido inofensivo y casi inaudible.
- No envejecen con el paso del tiempo.
- No generan residuos durante su funcionamiento.
- Prácticamente no necesitan mantenimiento: funcionan de forma autónoma y no suelen requerir limpieza ni mantenimiento.
- No dan problemas: una instalación fotovoltaica puede funcionar eficientemente hasta 30 años.
- Proporcionan ahorro: su propia microinstalación te permite ahorrar en la factura de la luz y liberarte de la subida de los precios de la electricidad.
- Son eficientes: una instalación bien elegida en función de las necesidades energéticas del edificio te permite satisfacer plenamente tus necesidades y minimizar tus facturas de electricidad.
Las placas solares son actualmente una de las formas más ecológicas de generar electricidad en el mundo. Tienen bajas emisiones de carbono: su creación, funcionamiento y eliminación dejan una pequeña huella de carbono en el medio ambiente, y la tecnología moderna mejora constantemente la forma en que se fabrican y reciclan los componentes fotovoltaicos, lo que los hace aún más ecológicos. Además, el coste de eliminación de los paneles fotovoltaicos es pequeño y los beneficios de una instalación fotovoltaica son enormes.
Beneficios de la instalación de placas solares
Menor demanda de energía de las centrales eléctricas
Hace tiempo que se sabe que las centrales eléctricas son una enorme carga y una amenaza para el medio ambiente (especialmente las centrales de carbón, que utilizan materias primas no renovables para producir electricidad). Son causa de contaminación del aire, el suelo y el agua. Por eso, con las innovaciones actuales, es importante buscar el mayor número posible de métodos para reducir el uso de la energía producida con su ayuda.
Una de las mejores formas de hacerlo es, por supuesto, mediante la instalación fotovoltaica. Ayuda tanto a optimizar la cantidad de electricidad extraída de la central como a transferir el excedente de electricidad producida a la red eléctrica para su posterior comercialización.
Reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera
La instalación de una instalación fotovoltaica permite reducir de forma inmediata la cantidad de contaminación por CO2 generada.
Una instalación equipada con placas solares extrae la demanda de electricidad de las placas fotovoltaicas puede reducir las emisiones de CO2 al mínimo absoluto (en función del sistema de calefacción utilizado).
Ecología y economía pueden ir de la mano
Las soluciones energéticas ecológicas están asociadas sobre todo a la inversión, que a su vez tiene que ver con el coste de adquisición de equipos innovadores.
Merece la pena considerar cuánto dinero podemos ahorrar anualmente de forma realista. En el caso de la instalación de placas solares, esta cifra debe multiplicarse por 20-25 años (el periodo de garantía del fabricante, que se da por la vida útil, el rendimiento y la fiabilidad de las células fotovoltaicas).
Desde un punto de vista práctico, todo depende del tamaño y la eficiencia de la instalación fotovoltaica.
Huella de carbono dejada por la producción de placas solares optimizada por la tecnología
Hasta hace poco, nos hemos encontrado con afirmaciones de que la producción de placas solares deja una importante huella de carbono y provoca contaminación atmosférica en forma de subproductos gaseosos.
Sin embargo, hay que señalar que los procesos de fabricación actuales han reducido considerablemente la producción de sustancias tóxicas al mínimo en los últimos años, sobre todo gracias al reprocesamiento de silicio de gran pureza.
Por tanto, se ha reducido la extracción de nuevas materias primas. A esto se añade el aspecto de las salvaguardias avanzadas para optimizar cualquier riesgo medioambiental. Por tanto, la producción de placas solares no tiene ninguna carga medioambiental.