Comprender y anticipar el mercado eléctrico exige una visión de los diferentes horizontes. Las previsiones de corto, medio y largo plazo permiten optimizar la operación diaria, gestionar riesgos y orientar decisiones estratégicas. Su integración es clave para todos los agentes del sector de la energía que necesitan adaptarse a un entorno cada vez más dinámico
Una estrategia energética bien fundamentada empieza por entender los distintos horizontes temporales y sus aplicaciones. A corto, medio y largo plazo, cada horizonte responde a objetivos distintos, pero entre todos ofrecen una visión coherente del presente y del futuro del mercado eléctrico.
Corto plazo: desde horas a pocos días
Las previsiones de corto plazo, que abarcan desde unas pocas horas hasta varios días, son esenciales para la operación diaria de activos energéticos, la participación en mercados spot e intradiarios y la gestión de servicios de ajuste. Son especialmente relevantes para la operación en tiempo real de activos renovables, baterías y sistemas híbridos de baterías con energías renovables, así como para la gestión horaria de la demanda eléctrica en un contexto de alta variabilidad. Los centros de control de utilities o productores independientes (IPP), así como los operadores de almacenamiento y agregadores, dependen de este tipo de previsiones para ajustar su producción, minimizar desvíos y maximizar ingresos. Este horizonte es especialmente relevante también para comercializadoras que necesitan fijar precios competitivos y ajustar su cartera de clientes hora a hora, así como para traders que buscan oportunidades de arbitraje.
Estas previsiones se caracterizan por su nivel de detalle, al tener granularidad horaria o incluso de quince minutos, lo que permite una gestión precisa de la operación. Además, permiten obtener estimaciones de precios de mercado, demanda eléctrica y producción renovable con un alto grado de fiabilidad, lo que las convierte en una herramienta indispensable para adaptarse con agilidad a la dinámica cambiante del sistema eléctrico.
Medio plazo: desde semanas a meses
Para abordar la planificación operativa en horizontes de semanas a meses, las previsiones de medio plazo se convierten en una herramienta esencial para la cobertura de riesgos y la toma de decisiones estratégicas. Comercializadoras, traders, grandes consumidores industriales y utilities las utilizan para definir estrategias de compra a plazo, optimizar contratos bilaterales, planificar el mantenimiento de sus activos o cubrir posiciones en los mercados de futuros. Este tipo de previsiones también permite evaluar el impacto económico de decisiones operativas bajo diferentes condiciones climáticas y de mercado, integrando factores como la estacionalidad, la disponibilidad hidráulica o la variabilidad eólica y solar, que condicionan los balances energéticos.
Este horizonte es particularmente útil para industrias electrointensivas que planifican su producción en función de la evolución esperada de los precios, así como para generadores que necesitan valorar escenarios de mercado antes de comprometerse con estrategias de cobertura o estructuración de contratos a medio plazo.
Las previsiones de medio plazo pueden tener granularidad horaria, diaria, semanal o mensual y se caracterizan por el uso de metodologías que incorporan estocasticidad y escenarios probabilísticos, lo que permite capturar con mayor realismo la incertidumbre inherente al sistema eléctrico.
Largo plazo: desde años a décadas
Las previsiones de largo plazo, que se extienden a horizontes de entre 10 y 30 años con resolución horaria, son fundamentales para orientar decisiones estructurales en un contexto de transición energética. Este tipo de análisis permite evaluar la viabilidad de nuevas inversiones en generación renovable, almacenamiento de energía, electrificación de procesos industriales o producción de combustibles renovables como el hidrógeno verde. También son utilizadas en procesos de fusiones y adquisiciones (M&A) y en la valorización de activos renovables, donde es necesario proyectar flujos de ingresos y escenarios de rentabilidad a largo plazo.
Estas previsiones resultan imprescindibles para desarrolladores, bancos y fondos de inversión que necesitan elaborar modelos financieros robustos y estudios bancables. Pero también son clave para operadores del sistema, reguladores y responsables de planificación energética, que necesitan proyectar infraestructuras y políticas energéticas alineadas con los objetivos climáticos y de seguridad de suministro.
Empresas industriales que analizan la viabilidad del autoconsumo o la incorporación de baterías, así como generadores que estructuran contratos PPA (Power Purchase Agreement) para dar estabilidad a sus ingresos, se apoyan en estos escenarios de largo recorrido.
Desde el punto de vista metodológico, las previsiones de largo plazo más fiables se basan en modelos híbridos, que integran modelos estadísticos, inteligencia artificial y modelos fundamentales, los cuales mantienen el equilibrio de mercado y consideran la evolución de la oferta, la demanda y los costes marginales del sistema. Además, integran variables macroeconómicas, regulatorias, tecnológicas y de precios de commodities como el gas natural o los derechos de emisión de CO2, lo que permite construir escenarios coherentes con las tendencias estructurales del sector de la energía.
Una herramienta transversal para todos los perfiles del sector
La combinación de previsiones de corto, medio y largo plazo no solo permite operar con agilidad en el presente, sino también planificar con seguridad el futuro. Esta visión integrada es ya una práctica habitual entre actores tan diversos como comercializadoras, grandes consumidores, operadores del sistema, traders, desarrolladores y gestores de centros de control. Cada uno con sus necesidades específicas, pero todos compartiendo la necesidad de anticiparse, optimizar recursos y tomar decisiones basadas en datos fiables.
Análisis de AleaSoft Energy Forecasting sobre las perspectivas de los mercados de energía en Europa y las baterías
El jueves 22 de mayo se celebró una nueva edición de los webinars mensuales de AleaSoft Energy Forecasting, alcanzando ya la número 55. En esta ocasión, Javier Adiego Orera, CEO y cofundador de 7C Energy, fue uno de los ponentes invitados, para abordar el almacenamiento de energía con baterías. Durante el webinar se trataron temas como la importancia de las previsiones de demanda y de banda secundaria, el impacto del grado de uso sobre la rentabilidad de las baterías, su optimización financiera y los aspectos regulatorios, incluyendo ayudas y pagos por capacidad. Como es habitual, también se analizó la evolución reciente de los mercados de energía europeos y sus perspectivas.
La mesa de análisis contó además con la participación de Kiko Maza, Managing Director en WeMake Consultores, y Luis Atienza Serna, exministro del Gobierno español y expresidente de Red Eléctrica. Entre los temas que se trataron estuvieron las hibridaciones con energía eólica, los servicios auxiliares y las redes eléctricas de transporte y distribución.